martes, 23 de enero de 2007

Efectos secundarios de ver una película en sabado


EN MEMORIA DE MARIO

No siempre es un buen plan ver películas en sábado, los efectos secundarios que estas pueden causar son impredecibles, mas si uno es un consumista compulsivo como yo.

El día sábado me encontraba con uno de los integrantes de Alabama57 (uno de origen extranjero el cual cree que todo fue inventado en su país, si adivinaron es argentino) viendo esta segunda parte de la película Ocean's Eleven, ah como beben en esa película. Whisky, cerveza y lo mejor vino tinto. Al acabar esa peli el señor argentino y un servidor ya teníamos media estocada dentro (termino taurino que se utiliza en el arte de beber cuando uno ya anda medio tomado), ya que al finalizar ya teníamos encima dos botellas de vino y una botella de heineken casi de a litro.

No conforme con esto se nos hizo fácil lanzar una convocatoria vía sms y telefónica a nuestra logia de cuates, los cuales se presentaron en nuestro departamento con mas bebida. Al filo de las 9:00 PM ya teníamos 14 personas en casa y un gran porcentaje de estas ya en estado incrospito.
Durante la algarabía a alguien se le ocurrió gritar "vamos a ver a Fobia* al Bull**", acto seguido ya estábamos arriba del auto con dirección a este tan ya afamado antro. El concierto "dicen" que se desenvolvió con muy buen ritmo. Muchos de nosotros la verdad no lo apreciamos, ya que seguíamos la música que se producía al juntar nuestros vasos.

SER TERCO NO SE NACE, SE HACE

Después de traer (haré el recuento de lo bebido):
En botellas

  • 2 Vino
  • Mucha cerveza
  • 2 Botellas de Vodka
  • 4 Bacardi blancos
Se nos ocurrió la gran idea de asistir al "Pedro Infante", yo me pregunto para que hacer esto, cual es el fin de seguir bebiendo, ya era muy tarde, quien mas podría estar en ese cantabar.

Después de cantarles unos cuantos goyas, como no te voy a querer e hijo puto amarillo a los emplumados amigos del valet parking, nos dirigimos al Pedro infante.

Al llegar me encuentro con la sorpresa de que había más colegas en dicho antro, no es por exagerar pero estaba a reventar el lugar. No pudimos ni cantar, lo cual me molesto y decidimos irnos.

Tal cual les paso a los buzos en la película Mar Abierto (open Water) no contamos bien a los miembros del grupo... Al llegar a casa dormimos y al levantarme 11:00 AM para ir al estadio y ver a mis Pumas recordé que se no había olvidado algo en el Pedro Infante.

Mario perdón guey, en este tipo de eventos, al igual que los buzos en el fondo del mar, hay que andar en parejas. Prometo para la próxima darles una tarjeta de esas que dan en los corporativos para acceder a los edificios "inteligentes" y tener mejor control del grupo di!!.

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